La Visión de Patmos.


  El libro de Apocalipsis serie.

Juan en Patmos.


William Branham.

Lee el plenamente en cuenta en...
La Visión de Patmos.

Apocalipsis 1:9,10
Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la Palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.
Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,

Esta serie de visiones de la Revelación de la Persona de Jesucristo, le fue dada a Juan mientras él se encontraba desterrado en la Isla de Patmos. Esta pequeña isla está a treinta millas (48 kms.) de la costa de Asia Menor en el Mar Egeo. Siendo que era muy peñascosa e infestada con serpientes, lagartos y alacranes, tenía muy poco valor comercial; y fue usada por el Imperio Romano como una colonia penal adonde confinaban los criminales más violentos, los prisioneros políticos, etc.

Ud. notará que Juan se identificó entre los Cristianos como un hermano en tribulación. Fue en este tiempo cuando la Iglesia primitiva estaba pasando por una persecución tremenda. No era solamente que “en todas partes se hablaba en contra de su religión”, sino que la gente misma era encarcelada y asesinada. Juan, al igual que multitudes anteriores, ahora estaba sufriendo encarcelamiento por la Palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo. Cuando lo tomaron preso, procuraron en vano matarlo, hirviéndolo en aceite por veinticuatro horas. Entonces los oficiales enfurecidos y sin poder, lo confinaron a Patmos, sentenciándolo como un brujo. Pero Dios estaba con Él, y le fue permitido dejar la isla y volver a Efeso donde de nuevo continuó como pastor hasta el tiempo de su muerte.

La gloria séptuple de Su Persona.

Apocalipsis 1:14-16,
14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego;
15 y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas.
16 Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.

Cuán conmovedora e inspirativa fue la aparición de Jesús a Juan, el cual estaba desterrado por causa de la Palabra. Y he aquí, de frente tenía a la Palabra VIVIENTE. Qué visión tan iluminadora, porque todo atributo descriptivo tiene un significado. ¡Qué revelación de Su glorioso Ser!

1.Su cabello blanco como la nieve.

Primeramente Juan ve y hace mención de la blancura de Su cabello. Era blanco y tan brillante como la nieve. Esto no era debido a Su edad. No, no. El cabello brillantemente blanco no significaba edad, sino experiencia, madurez y sabiduría. El Ser Eterno no envejece. ¿Qué es el tiempo para Dios? El tiempo significa muy poco para Dios, pero sabiduría significa mucho. Es como cuando Salomón clamó a Dios por sabiduría para poder juzgar al pueblo de Israel. Ahora Él viene como el Juez de toda la tierra y será coronado con sabiduría. Eso significa el cabello blanco y brillante.

Daniel lo vio con el cabello blanco. Él era el Juez abriendo los libros y de ellos juzgaba. Daniel lo vio que venía en las nubes. Es lo mismo que vio Juan; ambos lo vieron igual. Vieron al Juez con su cinto de juicio por los hombros, parado puro, santo, lleno de sabiduría, completamente apto para juzgar el mundo en justicia. Aleluya.

2. Sus ojos como fuego.

Piénselo, aquellos ojos que una vez fueron nublados con lágrimas de tristeza y piedad, aquellos ojos que lloraron de compasión frente a la tumba de Lázaro, aquellos ojos que no vieron la maldad de los asesinos que le colgaron en una cruz, antes con tristeza clamó: “Padre, perdónalos”. Ahora esos ojos son una llama de fuego, los ojos del Juez que recompensará a aquellos que le rechazaron. Esta era la emoción que Él manifestó más cuando apareció como Hijo de Hombre, con frecuencia lloró. Sin embargo, detrás de aquel llanto y tristeza aún estaba Dios. Esos mismos ojos vieron visiones. Miraron hasta lo profundo de los corazones de los hombres y conocieron sus pensamientos y todos sus diversos caminos. Era Dios quien ardía a través de esos ojos mortales y clamó a aquellos que no le reconocieron:
...porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.
San Juan 8:24.
Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis. Mas si las hago (las obras de mi Padre), aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.
San Juan 10:37 y 38.
Así como Jeremías de la antigüedad, Él era el profeta de lágrimas porque los hombres no recibieron la Palabra de Dios y pusieron a un lado la revelación.

Esos ojos ardientes y llameantes del Juez están grabando las vidas de toda carne aun ahora mismo. Recorriendo toda la tierra, no hay nada que Él no sabe. Él conoce los deseos del corazón y lo que cada uno piensa hacer. No hay nada que no será revelado porque todas las cosas están desnudas ante los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta. Piénselo, Él aun conoce lo que Ud. está pensando ahora mismo.

Sí, allí está parado como Juez con ojos como llama para pronunciar juicio. El día de misericordia ha cesado. Oh, que los hombres se arrepienten y busquen Su presencia en justicia mientras aún hay tiempo. Que pudieran hacer de Su seno su almohada mientras el mundo se deshace en fuego.

3. Los pies de bronce.

“Y Sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno”.
El bronce se conoce por su dureza. No se conoce alguna cosa que se puede mezclar con el bronce para templarlo. Pero este bronce que describe Sus pies es aún más sobresaliente porque ha resistido la prueba del horno ardiente, lo cual ningún otro ha resistido. Y así es, por cuanto el bronce significa Juicio Divino, un juicio que Dios determinó y trajo a cumplimiento.

Y Jehová dijo a Moisés: Hazte una serpiente ardiente, y ponla sobre una asta; y cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá. Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre una asta; y cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía.
Números 21:8 y 9.
Israel había pecado, y el pecado tenía que ser juzgado. Por lo tanto Dios mandó a Moisés que colocara una serpiente de bronce sobre una asta, y todo aquel que la mirare fue salvo de la pena de su pecado.

Pero algún día esos pies de bronce pisarán esta tierra. Y entonces Él será el Juez de toda la tierra y juzgará a la humanidad con rectitud y perfección, y no habrá manera de evadir ese juicio. No habrá manera de cambiar o de templar ese juicio. Entonces el que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía. El Ser Inmutable no cambiará entonces, porque nunca lo ha hecho y nunca lo hará. Esos pies de bronce destruirán al enemigo, destruirán al anticristo, a la bestia, la imagen y todo lo que es vil ante Su vista. Él destruirá los sistemas eclesiásticos que han tomado Su Nombre sólo para corromper su brillantez, y los abrumará juntamente con el anticristo. Allí estarán todos los malvados, los ateos, los agnósticos, los modernistas, los liberales, como también la muerte, el infierno y la tumba. Así será. Porque cuando Él viene entonces los libros serán abiertos. Entonces es cuando aparecerán hasta las vírgenes fatuas y la iglesia tibia. Él separará las cabras de las ovejas. Cuando Él viene se apoderará del reino porque es Suyo, y juntamente con Él vendrán los miles de diez miles, Su Novia, los cuales vienen para ministrarle. Gloria. Oh, es ahora o nunca. Arrepiéntanse antes de que sea demasiado tarde. Despierten de entre los muertos y busquen a Dios para que les llene de Su Espíritu, porque de otra manera perderán la Vida Eterna. Háganlo ahora mientras hay tiempo.

4. Su voz era como estruendo de muchas aguas.

¿Qué representan las aguas?
Me dijo también, Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
Apocalipsis 17:15.
Su Voz era como el sonido de multitudes hablando. ¿Qué es? Es el juicio. Porque estas son las voces de las multitudes de testigos, quienes por medio del Espíritu Santo en todas las edades han testificado de Cristo y han predicado Su Evangelio. Será la voz de todo hombre siendo elevado enjuicio contra el pecador que no quiso recibir el aviso. Las voces de los siete mensajeros se oirán fuertes y claras. Aquellos predicadores fieles que predicaron el poder salvador de Jesús, el bautismo en el Nombre de Jesús, el bautismo y el poder del Espíritu Santo, los cuales se mantuvieron con la Palabra más que con sus propias vidas; todos ellos eran la Voz de Jesucristo por medio del Espíritu Santo a través de las edades.
Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos.
San Juan 17:20

Oh, si Ud. solamente lo viera. Fueron las aguas que destruyeron al mundo, pero fueron las mismas aguas que salvaron a Noé, y que también salvaron a la tierra entera para Noé. Escuche Su Voz, la voz de Sus siervos, mientras esa Voz llama a arrepentimiento y Vida.

5. En Su diestra había siete estrellas.

“Tenía en su diestra siete estrellas”. Desde luego, ya sabemos según el versículo veinte qué son las siete estrellas: “El misterio de las siete estrellas son los ángeles (mensajeros) de las siete iglesias”. Ahora, de ninguna manera pudiéramos errar en esto porque Él mismo nos lo interpreta. Estas siete estrellas son los mensajeros a las siete edades sucesivas de la iglesia. No son llamados por sus nombres. Solamente están mostrados como siete, uno para cada edad. Desde la edad de Efeso hasta esta edad de Laodicea cada mensajero trajo el mensaje de verdad al pueblo, nunca fallando en vigilar que fuera la Palabra de Dios para dicha edad de la iglesia en particular. Cada uno se mantuvo fiel. Fueron firmes en su lealtad hacia la luz original. A medida que cada edad se separó de Dios, Su mensajero fiel tornó esa edad hacia la Palabra. Sus fuerzas venían del Señor, de otra manera ellos nunca hubieran podido rendir la marea. Estaban seguros en Su cuidado, porque nada podía sacarlos de Su mano, ni tampoco había nada que pudiera separarlos del amor de Dios, ya fuera enfermedad, peligro, desnudez, hambre, cuchillo, vida o muerte. Ellos estaban verdaderamente rendidos a Él, y guardados por Su omnipotencia. No tenían temor de la persecución que les esperaba en el camino. Dolor y burla solamente eran motivos para dar gloria a Dios de que fueran contados dignos de sufrir por Él. Y en gratitud por Su salvación, ellos ardían. con la luz de Su Vida, y reflejaban Su amor, paciencia, mansedumbre, templanza, benignidad y fidelidad. Y Dios los respaldaba con prodigios, señales y maravillas. Fueron acusados de ser fanáticos y aleluyas. Fueron denunciados por organizaciones y puestos en mofa. Pero se mantuvieron fieles a la Palabra.

Y este consuelo no es únicamente para los mensajeros de las siete edades de la iglesia. Todo verdadero creyente está en la mano de Dios y puede experimentar de Su amor y poder, y recibir el beneficio completo de todo lo que Dios es para el creyente. Lo que Dios le da al mensajero, y como lo bendice y lo usa, es un ejemplo para todo creyente de Su bondad y cuidado para con TODOS los miembros de Su cuerpo. Amén.

6. La espada de dos filos.

“De Su boca salía una espada aguda de dos filos” De Su boca salía una espada aguda de dos filos.
Apocalipsis 1:16.
Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
Hebreos 4:12.
De su boca salía una espada de dos filos, la cual es la Palaba de Dios.

Ahora, Pablo dijo que la Palabra vino tanto en voz como también en poder. La Palabra siendo predicada, en realidad se demostró a Sí misma. Como una espada llameante y aguda, fue a las conciencias de los hombres, y como cuchillo de cirujano, quitó las enfermedades y libertó a los cautivos. Por dondequiera que fueron aquellos creyentes primitivos, “salieron predicando el Evangelio (la Palabra), y Dios confirmó aquella Palabra con las señales que seguían”. Los enfermos fueron sanados, demonios fueron echados fuera, y hablaron en nuevas lenguas. Esa era la Palabra en acción. Esa Palabra nunca ha fallado en la boca de Cristianos que creen. Y en esta última edad está presente en una forma más grande y más fuerte que nunca, en la verdadera Novia de la Palabra. Oh, manada pequeña, Uds. que forman la minoría, manténganse con la Palabra, llenen sus bocas y sus corazones de ella, y algún día Dios les dará el reino.

7. Su rostro como el sol.

La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
Apocalipsis 21:23.
Esta es la Nueva Jerusalén. El Cordero estará en esa ciudad, y por causa de Su presencia, no habrá necesidad de luz. Allí no saldrá ni se pondrá el sol, porque Él mismo es el Sol y la Luz. Las naciones que entran allí caminarán en Su Luz. ¿No está Ud. contento de que aquel día está sobre nosotros? Juan vio ese día que venía. ¡Así sea, Señor Jesús, ven presto!

Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios y todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará, ha dicho Jehová de los ejércitos, y no les dejará ni raíz ni rama. Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada. Hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en el día en que yo actúe, ha dicho Jehová de los ejércitos.
Malaquías 4:1-3.
Allí está nuevamente, el SOL brillando en toda su fuerza. Oh, la fuerza del Hijo de Dios brillando en medio de los siete candeleros de oro. Allí está parado Él, el Juez, Aquel que sufrió y murió por nosotros. Él tomó sobre Sí mismo la ira de la justicia Divina. Él solo pisó el lagar del vino del furor de la ira de Dios. Como ya hemos dicho, para el pecador Su Voz es como el rugido de la cascada o como el mar furioso golpeando la costa peñascosa con golpes de muerte. Pero para el santo, Su Voz es como el dulce murmullo de un arroyo mientras uno reposa satisfecho con Cristo. Brillando sobre nosotros con Sus rayos cálidos de amor, nos dice: “No temáis, Yo soy el que era, el que es, y el que ha de venir; Yo soy el Todopoderoso. Aparte de Mí no hay otro. Yo soy el Alfa y la Omega, el TODO”. Él es el Lirio de los Valles, la Estrella resplandeciente de la Mañana. Para mi alma Él es el más hermoso entre diez mil. Sí, aquel gran día está por manifestarse, y el Sol de Justicia nacerá y en sus alas traerá salvación.

Lee el plenamente en cuenta en...
La Visión de Patmos.



El libro de Apocalipsis.
Cjjntinuar en la próxima página.
(El Árbol de la Vida. El pecado original.)


Misterio de Jesucristo.

Inglés sitio de noticias.

El Libro de Apocalipsis serie.

Dios y la Ciencia.
- Arqueología.

El Rapto se acerca.

 
 

Las principales
enseñanzas del mensaje.

Buenas noticias.
Jesús murió por tu pecado.

Bautismo de agua.

 
 

Nube Sobrenatural.

Columna de Fuego.

La Shekinah Gloria de Dios.

La tumba está vacía.
Él está vivo.

El precursor.

Dios es Luz.

La Deidad Explicada.

Los actos del profeta.

Siete Edades de la Iglesia.

Los Siete Sellos.

Dios y la Historia.
Serie Índice - Daniel.

Serie de caminata
Cristiana.

La serie Navideña.

Serie Palabra viva.

Serie Últimos Días.

El Nombre de Dios.

Arca de Noé.

Ángel Aparece.

La Voz de la Señal.

Mitología.
Babilonia, la fuente.

El pecado original.
¿Fue una manzana?
Casamiento y Divorcio.
Dios y la Ciencia.
- Evolución.

Aquella Mujer
Jezabel.

Nuestra época Laodicea.

Cristo fuera de la Iglesia.

Los Nicolaítas.

 

Muerte.
¿Qué entonces?

Misterio Babilonia.

 

Dios y la Ciencia.
Microbiología.

Dios y la Ciencia.
Cosmología.

Dios y la Ciencia.
Mito de los dinosaurios.

Vindicación de un profeta.

 

Juicio Terremoto.

Armagedón.

La Sanidad Divina.

 

Arqueología.
Sodoma y Gomorra.

Este día se cumple esta
Escritura.

Nuestro joven sistema
solar.

Nuestro listado de
mensajes Español.

Bíblico Geología.

 

Allí está parado
como Juez
con ojos como
llama para
pronunciar
juicio.


   La Escritura Dice...

Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último;

y el que vivo, y estuve muerto; más he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

Apocalipsis 1:17-18.


Haga clic en una imagen para descargar PDF, de otra manera la imagen a tamaño completo.


YO SOY EL QUE SOY.

 

Cristo. En el
candelero de oro.

Los actos del profeta.

(PDFs)

The Two Babylons

desde Rev Alexander
Hislop. (PDF Inglés)

Una ladera de la
montaña y el rosal en
la nieve en China.

Lirios de fuego.

Columna de Fuego.
- Houston 1950.

Luz en una roca
piramidal.


Hub Mensaje...Elija el idioma y descargar mensajes gratis desde Hermano Branham.